La Casa de la Juventud acoge esta semana un taller para la mediación comunicativa a través de la lengua de signos, con el que se pretende “acabar con las barreras establecidas a la hora de comunicarnos, independientemente de la diversidad funcional que se tenga”, según ha explicado la monitora, Carmen Barba.
En este sentido, la responsable del taller ha indicado que actualmente son 12 las plazas activas, si bien hay hasta 15 en reserva, y ha detallado que el curso va a tener un total de 15 horas de duración, tres horas por día, desde el pasado lunes hasta mañana viernes que será la clausura.
Barba ha manifestado que “la lengua de signos es un sistema alternativo de comunicación para personas con alguna dificultad a la hora de comunicarse o con el lenguaje verbal” y ha insistido en que “esto no debe ser un impedimento a la hora de mantener una conversación”.
El objetivo del taller es aportar formación tanto práctica como teórica, además de enseñar a tratar a las personas con problemas de audición y lenguaje. A lo largo de las clases, las alumnas han podido mantener una conversación cotidiana sin ningún tipo de inconveniente.
La experta en lengua de signos ha incidido en que “el curso está formado por una parte teórica y otra práctica para aprender cuáles son los parámetros que debemos seguir para ejecutar los signos, así como la expresión facial, siendo este último uno de los parámetros más importantes y que ahora se torna más complicado con el uso de la mascarilla”.
Barba ha detallado que “primero se empieza por los saludos, la edad, los gustos y aficiones o las comidas… con el fin de hacer más amena la convivencia en la sociedad”, si bien ha especificado que “en tan poco tiempo se puede aprender con un amplio vocabulario y practicando mucho”.
La monitora ha lamentado que en Andalucía no haya posibilidades de poder aprenderlo y para ello hay que ir a ciudades como Madrid o Barcelona” y ha explicado que “la lengua de signos no es un idioma universal sino que se habla de diferente forma en unos lugares u otros”. Finalmente, ha subrayado de que “cuanta más gente conozca esta lengua, mejor va a ser la convivencia en sociedad”.