La Consejería de Salud de la Junta de Andalucía iniciará el próximo lunes 22 de octubre la campaña de vacunación de la gripe para proteger a la población de riesgo y evitar complicaciones derivadas de esta enfermedad.
La Administración sanitaria pondrá a disposición de la ciudadanía cordobesa 148.060 dosis de vacunas, más del 10% que en la temporada anterior, con el objetivo de aumentar la cobertura en la población de riesgo, que cuenta con 148 puntos de vacunación en toda la geografía cordobesa. La adquisición de estas vacunas ha supuesto un coste cercano a los 440.000 euros.
Coincidiendo con la campaña de vacunación frente a la gripe, que se prolongará hasta diciembre, se recomienda también vacunarse frente al neumococo, una de las principales bacterias productoras de neumonía, y causante de otras infecciones, como la sinusitis y la otitis media. Así, se vacunará de forma sistemática a las personas mayores de 65 años que conviven en residencias y en centros de estancia diurna, así como a las personas entre 65 y 76 años, que no hayan sido vacunadas en años anteriores, ampliándose este año la cobertura un año más que en la temporada pasada.
La vacunación es una de las medidas más eficaces para prevenir determinadas enfermedades, en este caso la gripe, en aquellos grupos de población que son más vulnerables al virus. Igualmente existen otras medidas de prevención para protegerse, basadas en medidas higiénicas sencillas, como taparse la boca, usar pañuelos desechables y lavarse con frecuencia las manos, ya que éste se transmite por el aire, al toser o estornudar.
Grupos de riesgo ampliados
En este contexto, se recomienda inmunizar a las personas mayores de 65 años y las que padecen determinados problemas crónicos de salud, a las que la gripe puede producir un agravamiento de su enfermedad o traerle complicaciones – problemas respiratorios severos, cardiopatías, cáncer o alteraciones del sistema inmunológico y metabólico- o que padezcan obesidad mórbida.
Junto a estas poblaciones, también ha instado a que se inmunicen las mujeres embarazadas, en cualquier momento de la gestación, para prevenir la gripe tanto a la gestante como al recién nacido. Asimismo, también deben inmunizarse los profesionales de la salud, los servicios comunitarios y los servicios públicos esenciales (fuerzas y cuerpos de seguridad, bomberos) así como quienes trabajan en instituciones penitenciarias y centros de internamiento, por estar en contacto frecuente con personas en situación de riesgo, tanto para protegerse a sí mismos, como para evitar transmitir la gripe a las personas vulnerables a las que atienden.
Una novedad de la campaña de esta temporada es que también se recomienda la vacunación a otros grupos considerados de riesgo, como las personas con celiaquía, con fístula de líquido cefalorraquídeo y con enfermedad inflamatoria crónica (artritis reumatoide, lupus eritematoso sistémico, enfermedad inflamatoria intestinal, etc.).