El hermano mayor de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, José Ortiz Esquinas, informó ayer a Televisión Baena en una amplia entrevista, a cerca de los detalles y motivos de la restauración a la que va a ser sometida en los próximos días la imagen de Jesús Nazareno tras su aprobación por parte del Cabildo de la Cofradía y la autorización pertinente del Obispado de Córdoba.
En primer lugar, Ortiz ha aclarado que tras consultar la opinión de varios expertos y solicitar distintos estudios del estado de conservación de la imagen y del proceso de restauración que precisaría, “éstos nos han transmitido que no hay que preocuparse pero que es necesario intervenir ya, porque la policromía de la imagen, sobre todo en la cara, está muy afectada ya que han aparecido algunas zonas blancas y se está levantando el craquelado original del rostro”.
Ortiz también ha señalado que se aprecia un “oscurecimiento de los barnices amarillos que se le aplicaron para la protección de la talla, lo que está provocando la aparición de numerosas manchas que están deteriorando la calidad de la imagen, afectando a la madera y a su policromía”.
Entre las zonas más afectadas por este deterioro de la policromía, Ortiz ha señalado que “además de la cara, las manos también están muy afectadas, principalmente por el roce de la cruz al procesionar, así como los pies, por el efecto del besapies que se realiza cada año entre los fieles. También se han detectado unas grietas en la madera, tanto en las piernas como en la cabeza, que se van a estudiar para ver si son de los propios ensambles o que han aparecido ahora”.
Otra de las intervenciones que se van a llevar a cabo es “corregir una pequeña anomalía detectada en la fijación de los pies a la peana que estaba provocando algunos daños en la imagen debido a los movimientos que tiene cada vez que procesiona.”
Por otro lado, y de cara a la mejor conservación, no solo de la imagen del Nazareno, sino del resto de imágenes patrimonio de la Cofradía que en los próximos años también se van a someter a procesos de restauración, Ortiz ha adelantado que se va a acometer una próxima actuación para “una climatización idónea del Camarín de la Cofradía porque actualmente solo tiene instalado un sistema de recirculación de aire que no es adecuado para la perfecta conservación de las imágenes que allí se encuentran”.
Sobre la elección del restaurador egabrense, Salvador Guzmán, Ortiz ha informado que “la Cofradía se decantó por la proximidad del taller de éste, ubicado en Cabra y su contrastada profesionalidad”. Así mismo, ha indicado que se han manejado “varias alternativas, siempre contando con restauradores y no otro tipo de profesionales, para llevar a cabo unos trabajos consistentes en recuperar el aspecto original de la imagen de Jesús, no introducirle cambios, para que se conserve lo que tenemos, siguiendo además las directrices que marca el Obispado”.
Por último, el hermano mayor de la Cofradía de Jesús Nazareno ha señalado que el proceso de restauración “durará un mes y medio, aproximadamente”, pero no concretó el día exacto que será trasladada la imagen, aunque, eso sí, aseguró que “este viernes Jesús estará todavía en San Francisco para el culto de sus fieles”.
Los trabajos se llevarán a cabo durante los meses de julio y agosto, por lo que durante ese periodo la imagen de Jesús Nazareno será retirada del culto en la iglesia conventual de San Francisco. La conclusión de los trabajos está prevista para finales de agosto por lo que la imagen del patrón de Baena estará de vuelta, ya restaurada, para poder celebrar, del 11 al 13 de septiembre, el triduo en su honor y el 14 de septiembre presidir los actos oficiales de la mañana en el Día de la Exaltación de la Cruz y procesionar por la tarde por las calles de Baena.
La última restauración que se realizó a Jesús Nazareno fue en el año 2010, sustituyendo la peana y procediendo a darle unos retoques en la policromía de la cara y piernas.