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La necesaria lluvia para el campo y para las reservas de agua de los embalses se ha hecho de rogar a lo largo de este atípico y excesivamente seco mes de noviembre que se ha cerrado en Baena con el balance de precipitaciones más bajo de la última década, con un acumulado de lluvias de tan solo 16,2 litros por metro cuadrado (l/m2), según los datos facilitados a Televisión Baena por Abonos Cassani.
Y eso que en los dos últimos días del mes se han rozado los 8 litros, casi la mitad de lo que ha caído en Baena durante todo noviembre que, normalmente, siempre ha sido un periodo de abundantes lluvias, aunque la tendencia de los últimos años ha ido manifiestamente a la baja como demuestra la comparativa anual de noviembre con 31,5 l/m2 en 2022, que hasta ahora era el dato más bajo, y 41,7 l/m2 en 2021.
En el estudio de esta última década, el record de lluvias en noviembre se alcanzó en 2019 con 132,1 l/m2, seguido del registro de 2014 que fue de 106,5 l/m2 y en 2020 se alcanzó el tercer mejor dato de este ciclo con 93,0 l/m2.
Por el contrario, en noviembre de 2015 bajó drásticamente la pluviometría en Baena con tan solo 36,8 l/m2, iniciándose un periodo continuado de “altibajos” ya que en 2016 se recogieron 88,1 l/m2; en 2017 bajó a 53,9 l/m2 y en 2018 volvió a subir hasta los 71,2 l/m2.
En lo que respecta a la situación de los pantanos de la provincia de Córdoba, se espera que estas últimas lluvias aumenten sus reservas que actualmente se encuentran al 15,32% de su capacidad con 517 hm3 de agua embalsada sobre los 3.357 hm3 de su capacidad máxima. No obstante, hace justo un año estaban aún peor, cuando el agua acumulada al cierre de noviembre no llegaba al 14% (13,78) con 465 hm3. Unos datos que nada tienen que ver con la media de los últimos 10 años cuando en los embalses cordobeses se acumulaba un 44,58% de agua con 1504 hm3.
En el caso concreto del pantano de Vadomojón, la situación actual sigue siendo preocupante, ya que, a 30 de noviembre, ni siquiera alcanza el 7,50% de su capacidad (7,41%), contado con un volumen de agua embalsada de 10,82 hm3 sobre los 146 de su capacidad máxima. Aunque, al igual que ocurre con el resto de embalses cordobeses, hace un año las reservas estaba aún peor, situadas en el 6,85% con tan solo 10,00 hm3 de agua; mientras que la media de los últimos 10 años está en el 42,81% con 62,00 hm3.
