Al Atlético Baenense se le escaparon ayer del “Juan Carlos I” dos valiosos puntos en el último minuto. Un inmerecido empate a uno ante el Castro del Río que no hizo justicia al mejor juego y dominio de los baenenses que tras el gol de Darío (1-0) en el minuto 72 no supieron amarrar la victoria en un final agónico en el que pudo pasar de todo.
Primero con el empate “in extremis” de los castreños que tras un despeje impreciso de la defensa y una dubitativa salida de Gabri, se beneficiaron de un control con la mano de su goleador Cristóbal, que el árbitro no apreció y que le sirvió para superar al meta baenense y marcar a puerta vacía (1-1 min. 89).
Aún así, y a pesar del mazazo del empate y de las infructuosas protestas al colegiado, el equipo tuvo su última oportunidad en el tiempo añadido, pero incomprensiblemente Rafa Arcos no acertó a rematar entre los tres palos un preciso “pase de la muerte” que le sirvió Dani Sánchez por banda derecha.
Un empate con sabor amargo que según el entrenador local, Jose Cáliz es “poca recompensa para el buen trabajo realizado” destacando el control del juego y la superioridad de su equipo que creó numerosas ocasiones, tanto en la primera como en la segunda parte, pero lamentando, a su vez, el desacierto de cara al gol para haber cerrado definitivamente el marcador y también, “la falta de experiencia y ansiedad de mis jugadores que con el resultado a favor, perdieron en algunos momentos el control del partido” dijo.