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La alcaldesa de Baena, Cristina Piernagorda, ha exigido “responsabilidades” a los concejales de IU, PSOE y al concejal Alfonso Rojano por “urdir una moción de censura que iba en contra de la ley” y les ha demandado que “pidan perdón porque quisieron engañar al pueblo de Baena con esta chapuza cuando peor lo estaba pasando el municipio por la pandemia”.
Estas declaraciones de la alcaldesa han tenido lugar tras recibir el decreto que ha dictado la sala de lo contencioso administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) por el que se determina “la firmeza de la sentencia de fecha ocho de septiembre de 2021 de dicho tribunal al no haber recurrido la misma el concejal Alfonso Rojano”, ha explicado Piernagorda.
La regidora baenense ha insistido en que “ahora hace un año de la moción de censura fallida y la justicia nos vuelve a dar la razón y ya de manera definitiva” y ha recordado que “el 12 de marzo de 2021, el juzgado contencioso administrativo de Córdoba ya dictó sentencia en la que vino a decir que el pleno de 26 noviembre de 2020, la actuación del Ayuntamiento fue impecable”.
Piernagorda ha detallado que “el concejal Alfonso Rojano recurrió esta sentencia, el TSJA volvió en septiembre a dar la razón al Ayuntamiento y hoy lo hace de forma definitiva”. En cuanto a la sentencia, la alcaldesa ha dicho que “decía que no había existido infracción de procedimiento de ningún tipo, ni vulneración de ningún derecho por parte del ayuntamiento y que Rojano Delgado pasó a ser concejal no adscrito por aplicación de la ley”.
La primera edil ha subrayado que “según recoge la sentencia, el Ayuntamiento se limitó a constatar la correcta aplicación de la Ley de Bases del Régimen Local al constatar que Alfonso Rojano fue expulsado definitivamente de su partido y que al contrario de lo que decía el informe de la secretaría del Consistorio, no había que votar en el pleno”.
La alcaldesa ha insistido en que “de tener lugar una votación sobre el pase de Rojano como concejal no adscrito, se le estaría proporcionado un derecho que perdió al ser expulsado de su partido, de forma definitiva una semana antes del pleno”, ya que “si hubiera que votar, Rojano nunca sería no adscrito porque la decisión estaría en sus manos”.
Finalmente, Piernagorda ha concluido diciendo que “se trata de un claro caso de transfuguismo” y tal y como recoge el decreto “Alfonso Rojano tendrá que pagar las costas por pleitear de mala fe con el impulso delos concejales de la oposición tanto de IU como del PSOE”.
