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La Sectorial Nacional del Aceite de Oliva Virgen Extra con Denominación de Origen ha pedido al Ministerio de Agricultura que no se establezcan limitaciones a la comercialización del virgen extra y que se reserven los términos ‘Virgen Extra’ y ‘Vírgenes’ para los aceites de oliva y no para otros aceites y grasas vegetales, en el futuro marco normativo que se está elaborando para la regulación del sector.
Desde la Sectorial Nacional de Aceite de Oliva Virgen Extra con Denominación de Origen, consideran “muy positiva la redacción de una norma de calidad específica para los aceites de oliva, pues de esta forma, se identifica plenamente la singularidad de un producto que nada tiene que ver con el resto de aceites vegetales comestibles”, y así se ha trasladado al Ministerio de Agricultura en el periodo de consulta realizado sobre esta normativa. Sin embargo, la sectorial considera que esta normativa “puede tener un margen de mejora, aprovechándola para regular diversos temas, entre ellos principalmente dos”.
Por un lado, reservar los términos ‘Virgen Extra’ y ‘Vírgenes’ para los aceites de oliva, y no para otros aceites y grasas vegetales ya que el consumidor hoy en día asocia estas menciones a las cualidades gastronómicas y saludables de los aceites de oliva, y si se le atribuyen a otras grasas con características diferentes, se podría generar confusión.
Y por otro lado, no introducir restricciones legislativas a la comercialización de aceites de oliva virgen extra, que corresponden a la máxima calidad de estos aceites, de forma que no tengan que sufrir una limitación diferente a la del resto de categorías comerciales de aceite de oliva, y de otras grasas vegetales.
Para la sectorial “estas limitaciones pondrían en riesgo el volumen comercializado de aceite de oliva virgen extra español, y por tanto, la rentabilidad de los productores que apuestan por la calidad en sus elaboraciones, entre ellos los inscritos en las Denominaciones de Origen Protegidas”.
Las Denominaciones de Origen oleícolas de España, algunas de las cuales llevan trabajando casi medio siglo, se han mostrado en este tiempo como claros instrumentos de desarrollo de la calidad y de la actividad oleícola, situando a los aceites de oliva vírgenes extra españoles al máximo nivel de reconocimiento en los mercados internacionales.
Además, en las Denominaciones de Origen oleícolas se concentra la práctica totalidad del olivar existente en los Parques Naturales de España, así como una proporción importante de las Agrupaciones de Producción Integrada y agricultura ecológica.
Por todo ello, desde la sectorial indican que están convencidos de que el objetivo del Ministerio de Agricultura es incrementar la comercialización de todas las categorías de los aceites de oliva, especialmente del virgen extra, y también de los vírgenes extra que cuentan con la garantía de origen y calidad de las 29 Denominaciones de Origen Protegidas de nuestro país.
