El concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Baena, Juan José Castro, ha dado a conocer la puesta en marcha de un programa para el control de las colonias de población felina existentes en las calles de Baena y Albendín “que en los últimos años han experimentado un crecimiento preocupante y así nos lo hicieron constar tanto vecinos como asociaciones y grupos políticos”.
Así lo ha indicado el responsable de la Delegación de Medio Ambiente, detallando que “para intentar atajar esta problemática, la Corporación Municipal destinó el año pasado una partida de 7.000 euros”.
Castro ha explicado que estas colonias felinas están formadas por “grupos de gatos callejeros que, generalmente, provienen de gatos domésticos, perdidos o abandonados, que se adaptan a la vida en las calles de nuestras ciudades y que suelen estar tan integrados en el entorno que se aprecia su presencia hasta que se convierten en un problema al generarse una superpoblación que da lugar a problemas medioambientales y higiénicos, por lo que es muy importante actuar en el control de estas poblaciones antes de que el tema se nos vaya de las manos”.
En este sentido, Castro ha añadido que hasta ahora se han venido utilizando varias formas de actuación para el control de estas colonias felinas como la eliminación de las capturas mediante eutanasia “un método que desde el Ayuntamiento no nos parece correcto” o el retirarle el alimento “pero esta opción suele resultar inviable porque tienen otras fuentes de alimento para ellos, tanto de personas particulares que los alimentan como de restos urbanos y de restaurantes”.
Por ello, lo que se ha propuesto como actuación más viable, es la opción que ha presentado la Clínica Veterinaria Tucán, adjudicataria de este servicio que se va a encargar de este control a través del proyecto CER, consistente en ‘capturar, esterilizar y retornar’ a los miembros de las diferentes colonias y que es el sistema más recomendado tanto por veterinarios como asociaciones protectoras de animales y el más utilizado por otros ayuntamientos”.
Sobre el proyecto CER, la veterinaria y directora de este programa, Eva Alfonso, ha explicado que se trata de “la mejor forma de reducir la superpoblación felina en las ciudades” y para ello “se necesita hacer un estudio previos de las colonias existentes y, contando con un grupo de voluntarios, se van alimentando con pienso para controlar su hábitos y, posteriormente, capturarlos con jaulas trampa para preceder a su castración o esterilización y tras marcar a dichos ejemplares, retornarlos a su colonia”.
Además, ha añadido la veterinaria, “este sistema va trabajando de forma individual con cada colonia y hasta que no se termina el trabajo con una, no se empieza con otra, para que el control sea efectivo”.
Finalmente, Eva Alfonso ha destacado la colaboración de la Protectora de Animales ‘Flacuchos’ y ha subrayado la importancia de la continuidad de estos programas para que sean efectivos y se aproveche realmente el esfuerzo humano y económico que suponen.